Y otro año llegó Halloween (felicidades Alejandro!).
Aquí esta fiesta es muy celebrada. Los irlandeses presumen mucho de que es una tradición local en vez de americana, como muchos piensan y sí: tienen razón - La celebración de Samhain (Halloween) comenzó enIrlanda hacia el año 100 d. C. Para los celtas, este día marcaba el cambio de estación así como el último día de la cosecha ya que entraba el período de oscuridad (invierno en el hemisferio norte).
La noche del 31 de Octubre, las almas de los muertos regresaban a visitar sus hogares terrenales. La gente encendía grandes fogatas para mostrarles a sus seres queridos el camino a casa y para ahuyentar a los malos espíritus. Para mantener a los buenos espíritus contentos y alejar a los malos, se dejaba comida o dulces fuera de las casas (esta tradición se mantiene: los niños van de casa en casa disfrazados pidiendo caramelos... y a nosotros nos tocará en un par de añitos...).
En 1846, los inmigrantes irlandeses llevaron consigo versiones de esta tradición a Estados Unidos, que les moló a los productores de Hollywood y se la apropiaron..... como otras muchas cosas.
De vuelta al mundo de los warriors, lo del disfraz lo teníamos más o menos organizado desde hacía tiempo: Alicia le trajo a Samuel uno de bombero en su última visita que, aunque mucho miedo no daba, nos valía perfectamente, porque Samuel estaba emocionadísimo por llevarlo al cole y enseñárselo a su amigo Bjorn. Para Martín habíamos comprado un disfraz hacía algunas semanas en Tesco. Ese lado estaba controlado.
La celebración - como cayó en sábado, decidimos juntarnos en casa con los Torre y hacer una comida. Laura trajo frijoles charros que estaban espectaculares; nosotros hicimos sopa para los niños y albóndigas que se dejaban comer y de postre helado.
Al grupo se unió también Juan Francisco Corripio - el hijo de Caco, amigo de Manuel y Gerardo- que está internado en un colegio en Roscrea y estaba pasando unos días libres por Dublín. Claro, Samuel encantado con la idea de tener en casa todo un día a su amigo Janplanchisco, Juanfancrisco, Franfrancisco y todas las variantes que se os puedan venir a la mente (cuando le nombra, me recuerda a cri-cri contando la historia de los Gómez-Ránchez, Rinches-Grandes, Granjas-Rollos, Guímez-Runches, etc,etc. A Juan Francisco le encantaron los frioles charros de Laura, y comió un par de platos más unas cuantas albóndigas...estaba encantado de dejar, aunque fuera sólo por un día las patatas y las zanahorias tan frecuentes en la gastronomía local.
Una vez comidos y bebidos y tras un cafetito y un dulce (sólo los adultos claro), llegó la hora de romper la piñata. Laurita, aparte de cocinar fenomenal, es una artista del papel maché y hace unas piñatas que ya quisieran muchos profesionales.... así que la noche anterior, en veinte minutitos se hizo una de Frankenstein que daba pena darle con el palo! Bonita, bonita.
Los niños le dieron todo lo fuerte que pudieron y aquello no se rompía, Juan Francisco también le dió y parece que le costaba... luego fuimos pasando todos a intentar romperla y nada: la piñata sigue aquí en casa prácticamente intacta porque no fuimos capaces de acabar con ella. Así que le sacamos los caramelos, los esparcimos en el suelo - igualito que si se hubieran caído al romperse la piñata - y todos los niños a coger todos los que pudieron.
Después estuvieron un ratito montando el tren de Samuel - es decir, Juan Francisco lo montaba y los otros cuatro bichos lo desmontaban a la misma velocidad - luego una peli de Disney en el sillón, descansando del esfuerzo realizado y todos a su casa satisfechos de la celebración.
Martín se comió su primer chupa-chups y le encantó! puso perdido de babas el pantalón de Juan Francisco que le tenía sentado en sus rodillas y él tenía pegajosas hasta las pestañas, pero no paraba de dar lametazos.
Nos ha gustado Halloween 2009 - aunque esperamos mejorarlo el año que viene :)
