Va de cumpleaños del 2014... ya pasados, pero cumpleaños

Esta reseña va de cumpleaños, porque somos tan  chulos que 3/4 de la familia cumplimos en años con una diferencia de mes y medio.

El primero: el de Samuel, ya sabéis, el 26 de agosto. Cayó en día de diario y a mí me tocó trabajar, así que lo celebramos un poquito el finde anterior, que nos fuimos a desayunar con los Farias-Arrieta (Miguel, Askun y Matilde) a Airfield, una granja que hay en Dundrum, muy cerquita de Dublín.



El sitio muy majete y el desayuno muy requetebueno: claro, el pan es casero, los huevos son de sus gallinas, las verduras de su huerto...todo fresquísimo.


Samuel se metió para el cuerpo una sopa que estaba de la muerta (y eso que Samuel y sopa suelen ser palabras incompatibles...);






Y Martín, por supuesto, ensalada. Esta vez con cous cous:



Me encantó la decoración del sitio...los detallitos rústicos le van genial. Al fin y al cabo el café está dentro de la granja:




Allí echamos la mañana tranquilamente: desayuno, tertulia, otro cafetito...

Al coche dirección a Dun Laoghaire, ¡y  a seguir comiendo! porque había que seguir celebrando el cumple de Samuel ¿no? esta vez, fuimos a un puestecito de helados que según Edu son los mejores de Dublín, ahí es ná! Pues helado para el cuerpo, porque son los mejores de Dublín, claro :-)






Entre el hiper desayuno, los helados, el te con pastas que nos tomamos para entrar en calor después del helado y algo que picamos en el Festival del Ukelele de Dun Laoghaire (quién me iba a decir a mí que en Irlanda hay una afición grandísima al ukelele?, pues vosotros ya lo sabéis) se pasó el día. 



El primer día de celebraciones por el cumple de Samuel se dio por terminado con estos bailes hawaianos.

El segundo día de celebraciones fue el día de su cumple: no puedo contar mucho de la mañana y principio de la tarde, pero sé que por la noche cenamos donde y lo que él quiso: pizzas del Domino's en casa (será posible? pueden elegir lo que quieren y donde quieren y se queda en casa comiendo pizzas!)




Y después de las pizzas, una tarta que le había pedido a papá (la misma que hizo el día de la comunión) y otra de un clon de La Guerra de las Galaxias (éramos muchos...)




El tercer día de celebraciones fue el día en que hizo la fiesta para sus compañeros del cole. Este año lo celebramos en las instalaciones deportivas del Trinity College: muy cerquita de casa y muy amplias: pagas dos horitas de alquiler de una pista multi-deporte y tienes un monitor que organiza los juegos y además ellos mismos te traen las pizzas y te ponen una sala para que los enanos puedan merendar tranquilamente - la opción nos pareció perfecta y la verdad es que la tarde salió genial. Vinieron un montón de niños y por las caras de felicidad durante la fiesta y de cansancio cuando se iban, yo creo que se lo pasaron bien. Hicieron de todo: carreras, fútbol, balón prisionero, carreras de saltos, de relevos... luego pizzas y litros y litros de zumo. La monitora de lo mas maja y con una paciencia infinita supo controlar  a estos salvajes sin suicidarse en el intento, que ya es mucho decir.













En resumen que Samuel no se pudo quejar esta vez de no haber celebrado su cumple como Dios manda: tres días, tres de fiestas... como las Casas Reales, vamos.

La celebración del cumple de Martín, a principios de octubre, tampoco estuvo nada mal: ¡nos fuimos de finde a Irlanda del Norte!

Ya llevábamos mucho tiempo con ganas de conocer las Montañas Mourne y el Silent Valley (Valle Silencioso) que está en el centro de la cordillera, así que pensamos que esta era una buena ocasión.

En nuestro camino al norte, visitamos Carlingford: un pueblito todavía en la República de Irlanda pero casi casi en la frontera. Muy pintoresco, con sus tiendecitas todas monas, restaurantes chiquititos, con guirnaldas de luces en las calles y flores multicolores por todos lados. Un pueblo turístico cien por cien. 









Allí nos echamos una tarde, antes de llegar al sitio donde íbamos a pasar la noche: un hostal de montaña, en el pueblo (bueno, las cuatro casas) de Attical: el Mourne Lodge.  El sitio majo, fue para nosotros solos, allí nos cocinamos la cena y celebramos el cumple con tarta y todo.





Por la mañana, desayuno recién hecho por la dueña y luego a caminar un ratillo al Silent Valley...







Las Montañas Mourne son de lo mas peculiar: la cordillera está formada por 28 montañas, el pico mas alto es el Slieve Donard, de 850 metros de altura. No muy altas... tienen de un color rojizo muy llamativo y son muy áridas. En el Silent Valley se encuentra la presa de Ben Crom, que lleva suministrando agua a Belfast y alrededores desde los años 30. Tanto el Valle como la presa se pueden visitar, y la verdad es que el paseo merece la pena. 





Hay un parque con columpios para peques, un estanque y kilómetros y mas kilómetros de naturaleza tranquila, de silencio y de paz. Lo que mas llama la atención cuando llegas es precisamente eso: el silencio y la paz (que nosotros por supuesto rompimos durante un ratillo, para que se despertaran los "leprechauns" :-))





Hicimos mil y una foto a cual mas bonita, y ojalá pudiéramos habernos quedado mas tiempo para hacer una excursión larga, pero teníamos que volver a Madrid porque Gerardo y Alicia volaban a Madrid esa misma noche. El viaje fue relativamente rápido, pero no permitió quedarnos enganchados de la zona, a la que seguro volveremos pronto.





De vuelta a la normalidad en Dublin - si es que nuestra vida se puede considerar normal- y depués de una semanita, Martín celebró su cumple con sus amigos del cole en el Leisure Plex (parque indoors, con piscina de bolas y columpios donde organizan fiestas para peques con merienda y mascota gigante de peluche incluidas). La primera fiesta de cumple con los amigos para Martín, y el tío no se lo pudo pasar mejor: subió, bajó, saltó, corrió y comió. Tuvo un montón de regalos y la cara de felicidad no se le borró de la cara en toda la tarde. Samuel, que en principio no estaba muy animado, también se lo paso estupendamente, porque se trajo a su amigo James y se pasó la tarde jugando con él y con Martín y sus colegas(James y él iban de mayores, claro...).

No tengo muchas fotos, porque la batería de la cámara se murió en plena celebración, pero seguro que os hacéis una idea:






Además en esos días tuvimos la visita de los Torre (Laura, Daniel y las niñas) así que fue  un fin de semana redondo para los warriors






Se llevan ahora muchísimo mejor que cuando vivíamos todos en Dublín... esas cosas que tiene la vida, ¿no?

Ya veis, casi me lleva un año contar los cumples, pero las fotos merecen la pena no???? Poco a poco nos iremos poniendo al día :-)

Besos a todos








Conócenos un poquito más

¿Quieres saber más sobre nosotros? Corre, haz click aquí



Vamos creciendo

Lilypie Kids Birthday tickers Lilypie Kids Birthday tickers
Soy de la familia Madresfera!

Seguidores

Num de visitas