Empieza nuestra pretemporada navideña

Este fin de semana hemos dado el pistoletazo de salida a nuestra pretemporada de Navidad.

La verdad es que aquí los eventos pre-navideños empiezan con el mes de Diciembre, pero el clima ha sido tan malo estas dos últimas semanas que muchos de ellos fueron cancelados/postpuestos y lo jugoso ha empezado este finde.

Para nosotros, el comienzo oficial de las pre-fiestas empezó ayer con nuestra visita a Marks&Spencers para encargar la cena de Nochebuena: un peassso pavo de dos kilitos y medio que nos vamos a zampar el día 24 por la noche (y seguro que el 25 a mediodía también, porque sobrará...) y que, por supuesto nosotros no vamos a preparar: lo recogemos en la tienda ya rellenito y listo para meter en el horno! viene hasta con su bandeja, así que ni ensuciaremos la nuestra: qué lujazo!

Hoy hemos tenido jornada completa: por la mañana papá y Samuel se han ido a la pisci mientras Martin y mamá nos quedábamos en casa limpiando, planchando, haciendo la comida y demás tareas ineludibles que entre los dos hemos acabado en un plis plas.

Los warriors han comido temprano (receta nueva de garbanzos que vamos a repetir a menudo porque sale estupenda) y luego todos a la calle, al mercadillo navideño del IFSC donde habíamos quedado con Miguel e Izaskun para celebrar las fiestas por adelantado (porque ellos se van a México esta semana y no vuelven hasta después de fin de año).

Como siempre la quedada estupenda: nos hemos metido unos perritos (o perrotes) calientes im-pre-sio-nan-tes. Para acompañar a la comida, unos vinos tipo ponche (calientes y especiados) de la ribera del Rin que entraban - y luego subían - espectacularmente bien. O sea, que hemos podido hasta brindar por el nuevo año!




Mientras nosotros nos metíamos el colesterol directamente en vena, Samuel ha estado danzando por la zona (sobre todo por la de las "pachuches")




y Martín ha estado sumido en sus pensamientos metafísicos-ultrasensoriales. Los que le conocéis bien, sabéis que lo hace a menudo, sobre todo después de comer:



De postre, Samuel e Izaskun han rematado la faena con unas crepes (de nutella y nutella+plátano respectivamente) que quitaban el hipo



...y todo esto rodeados de puestos muy tipo tirolés, tan bien ambientados, que después de la comida, y sobre todo después del vino, a mí me han entrado unas ganas enormes de comprar un gorrito de fieltro de los típicos de la zona cantar eso de "Edelweiss, edelweiss, la, ra, la,ra, la, ra, la..." en plan Julie Andrews y el clan Von Trapp, pero luego he tenido un momento de lucidez y he visto que me faltaban churumbeles y que podía poner en evidencia a nuestros amigos... así que lo he dejado para una mejor ocasión.

Después, paseito arriba y abajo, cafe en el Jurys Inn (por cierto, una cafetería perfecta para ir con niños y con cochecitos - tranquila y con espacio suficiente para no molestar a nadie) y despedida, que es domingo y toca prepararse para la dura semana que se avecina.

Ya nosotros solitos, yendo para recoger el coche hemos pasado por la puerta del mercadillo y Samuel nos ha pedido montar en el carrusel, así que hemos entrado de nuevo y se ha montado una vez, hemos comprado "pachuches", hemos saludado a un par de conocidos y esta vez sí, para el coche.


En el camino papá ha hecho alguna instantánea de la zona, que la verdad es que está bonita, bonita con la iluminación navideña.





Hemos hecho bastantes mas fotos...a ver si hago un montaje uno de estos días con todas las que no he puesto para que no se queden "perdidas", porque hay algunas muy bonitas.

Y eso es todo por hoy! Esta semana esta llena de eventos, ya iremos escribiendo las reseñas y colgando las fotos.

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